Europa quiere construir un futuro mejor y seguir creciendo en mejorar nuestro parque inmobiliario. Así, por ejemplo, hay a disposición de los ciudadanos más de 3.500 millones de euros solo para rehabilitación edificatoria y, desde Taresco, Ingeniería y Construcción, queremos darte las herramientas necesarias para que te beneficies de ellas.
La mayor ventaja de estas ayudas es que no tributan como ingreso en el IRPF y, sin duda, serán un gran revulsivo a la construcción en España. Así, por ejemplo, leíamos hace unos días en El Comercio que Asturias repartirá 205 millones en ayudas a la vivienda durante cuatro años, una inversión histórica fruto de la suma de fondos de la UE, estatales y regionales.
A través de las comunidades autónomas
Desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana se afanan por dar a conocer este programa de rehabilitación para la recuperación económica y social en entornos residenciales y, a este respecto, ya avanzaron que la distribución de los fondos Next Generation EU entre los beneficiarios finales se canalizará a través de las Comunidades y Ciudades Autónomas.
A través del programa se prevé alcanzar las 510.000 actuaciones de renovación de viviendas en el segundo trimestre de 2026. En total, se espera ejecutar 510.000 actuaciones de rehabilitación durante todo el periodo de aplicación del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), lo que implica un ritmo medio de 71.000 viviendas al año. En 2019 se rehabilitaron algo más de 31.100 hogares y, aunque supone un 10% más que en 2018, el objetivo del Gobierno es multiplicar la actividad por diez de aquí a 2030, llegando a las 300.000 viviendas al año.
El objetivo global de las actuaciones es reducir al menos un 30% el consumo de energía no renovable en los hogares y descarbonizar y bajar la demanda de calefacción y refrigeración como mínimo un 7%. Es importante acreditar la reducción del consumo y para ello un experto tiene que expedir un certificado energético de la vivienda o del edificio antes y después de la actuación. La vía más efectiva para alcanzar los umbrales exigidos en el marco del PRTR es actuar sobre la envolvente del edificio, colocando aislamiento tanto en fachadas como en cubiertas, y sustituir las carpinterías por otras con rotura de puente térmico para evitar que el frio “se cuele” por las ventanas.
Para cumplir estos objetivos, el Gobierno ha aprobado un Real Decreto, un Real Decreto-Ley y, posteriormente, una Ley, que recogen un conjunto de medidas y programas diseñados para desarrollar la actividad y apoyar las actuaciones subvencionables en este sentido.
El plan de rehabilitación residencial se divide en cinco programas que abarcan actuaciones a nivel barrio, edificio y vivienda; la creación de oficinas de prestación de servicios de apoyo y asesoramiento en materia de rehabilitación, la distribución de ayudas a la elaboración del libro del edificio existente y la redacción de proyectos de rehabilitación.
Asimismo, el plan contempla una serie de beneficios fiscales para incentivar las actuaciones. Así, por ejemplo, se pueden conseguir deducciones de hasta el 60% por actuaciones que reduzcan un 30% el consumo de energía primaria no renovable, o mejoren la calificación alcanzando las letras «A» o «B» en edificios residenciales.
En Taresco, Ingeniería y Construcción queremos ayudarte a hacer realidad tu proyecto de mejorar tu vivienda y estamos a tu disposición para asesorarte en este sentido.