En el año 2013 se impuso la obligatoriedad de contar con un certificado energético para la venta de una vivienda y, desde entonces, se ha puesto en valor todas aquellas medidas que permiten escalar en este baremo.
La eficiencia energética es una cuestión que revaloriza una venta ya que, ahora que estamos en máximos históricos de la electricidad, puede suponer un gran ahorro el contar con medidas que minimicen el consumo.
De hecho, un hogar con una calificación B puede llegar a horrar más de 350 € al año frente a uno de categoría E. Así lo aseguran desde el Consejo General de la Arquitectura Técnica de España que han desarrollado una interesante aplicación con la que medir los costes energéticos de un hogar.
Esta calculadora energética recoge los costes energéticos orientativos y establece el gasto anual en euros del consumo de calefacción, ACS y aire acondicionado tanto para una vivienda como para un edificio completo. Para ello, emplea los precios establecidos en la TUR (Tarifa de Último Recurso) para las instalaciones de gas, y el correspondiente a la tarifa PVPC para la electricidad. Asimismo, es una herramienta que nos ayuda, también, a disminuir estos costes con ideas prácticas a llevar a cabo en nuestra vivienda.
Escalar en la certificación energética de nuestra vivienda, sin duda, aporta grandes beneficios. Desde Taresco, Ingeniería y Construcción compartimos con vosotros algunos de ellos:
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Aporta transparencia sobre el estado de una vivienda
Cuando adquirimos una vivienda queremos conocer el estado de la misma. Ello determinará en buena medida la decisión de compra y contar con un certificado energético aporta transparencia en este proceso.
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Revaloriza el inmueble
Conocer si una vivienda es eficiente o presenta notables deficiencias, además de transparencia puede aportarle valor. De hecho, una vivienda eficiente incrementa significativamente su valor -hasta en un 25%- respecto al mercado.
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Reduce nuestra factura de luz y gas
El disparado precio de la energía obliga a tomar conciencia sobre el consumo y cómo reducirlo. Sin duda, contar con una calificación energética máxima, como os contábamos al inicio de este post, supondrá importantes ahorros.
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Mayor confortabilidad en tu hogar
La eficiencia energética también aporta un mayor confort a nuestro hogar e incluso a nuestra salud. Así, por ejemplo, si renovamos el aislamiento en la vivienda favorecerá su eficiencia y, también, su acústica promoviendo que el ruido no afecte a nuestro día a día y a nuestra salud, una deficiencia que afecta en la actualidad al 20% de la población europea.
Soluciones que, también, aportan salud es por ejemplo contar con un sistema de ventilación adecuado y esto no tiene porqué implicar que se vaya a pasar frío en una vivienda.
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Respeto al planeta
Sin duda, la razón más importante para contar con una calificación energética adecuada es el respeto al planeta. Debemos invertir en ser más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente.
El parque inmobiliario español presenta un grado muy alto de dependencia energética y, en consecuencia, son grandes responsables de las emisiones de CO2 a la atmósfera.
5 razones de peso, a las que seguro que sumarías muchas más. ¿Por qué no nos lo cuentas?
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