La monitorización de espacios nos ayuda a controlar los parámetros deseados y, con ello, conseguir diferentes objetivos como puede ser el ahorro.

Por ejemplo, en el caso de nuestra factura energética, hay en el mercado múltiples soluciones que nos ayudan a controlar el gasto. De la misma manera que podemos mejorar considerablemente la eficiencia de nuestro hogar. Así destacan los termostatos, por citar una solución, que han evolucionado hasta convertirse en complejos sistemas que no solo regulan la temperatura, sino que también pueden programarse en función de un horario o, incluso, activarse a través de nuestro móvil.

Y es que la tecnología ha supuesto una gran contribución a la edificación a través de las soluciones domóticas. Nos ayudan a regular la temperatura de nuestro hogar, a controlar la iluminación, la necesidad de ventilación… son múltiples las opciones que podemos encontrar en el mercado.

Soluciones que se extienden a los hogares, pero también a las instituciones públicas y que, desde Taresco, Ingeniería y Construcción S.L., aplaudimos. Es el caso del Ayuntamiento de León que ha comenzado a monitorizar el CO2 en el interior de sus espacios públicos, como relata el digital sobre edificios inteligentes Casadomo.

En el caso del consistorio vecino se ha evidenciado la necesidad de implementar este tipo de soluciones derivado de la pandemia. El Covid-19 exige una adecuada ventilación de espacios para evitar su proliferación y no por ello debemos pasar frío, como ya os contábamos en nuestro blog hace unos días.

Sensores para controlar la calidad del aire, pero también para monitorizar el estado de los bienes inmuebles. En esta ocasión, era en eSmarcity donde leíamos las investigaciones promovidas desde las universidades de Sevilla y Granada. Las instituciones académicas están involucradas en el proyecto de I+D+i Preforti a través del cual han instalado sensores que realizan una evolución continuada del monumento.

Tener un diagnóstico en tiempo real, sin duda, es toda una revolución en el mantenimiento de instalaciones como, en este caso, históricas. Ayuda mucho en su conservación y, por supuesto, es un gran ahorro en su rehabilitación porque nos permite actuar antes de que se produzca un problema.

Lo que está claro es que la monitorización ya no es ciencia ficción. Es una realidad que ha llegado para quedarse y reporta innumerables beneficios para la construcción. En primer lugar, porque aporta un plus de calidad y, en segundo, porque nos puede reportar grandes beneficios como el diagnóstico en tiempo real que comentábamos que realizan a través del proyecto Preforti.

En Taresco, Ingeniería y Construcción S.L. apostamos por la innovación ofreciendo las soluciones más revolucionarias a tu proyecto. Ponte en contacto con nosotros y estudiaremos tu caso.